Vida, esa es mi respuesta

 Llevo mucho tiempo preguntadome el porqué de demasiadas cosas, pensando las posibles respuestas, e intentando descubrir esos misterios que abarcan mi  pensamiento, creyendo, ilusa de mí, que haciéndolo seré más feliz. 

Como si fuese la única que a falta de otros motivos para vivir, buscase el sentido a todo lo que no entiendo. 

Jugando a ser importante en una misión de vida o muerte que puede salvar al resto del mundo.

Estúpida por querer ser la más inteligente, en un intento que nunca pudo pasar de eso de entender la vida como ninguno.

Y no sé si fue el viento que mareaba mi pelo, o las flores que empezaban a colorear los parques, pero sin duda algo cambió mi visión del mundo. 

Siempre he intentado buscar razones a los sucesos más especiales, cuando ese es su único motivo de ser, yo me convertía en ladrona e intentaba robárselo, a todos y cada uno de ellos.

La muerte es un misterio, y la vida... la vida es el desastre más bonito que conozco.

Es un sin sentido que no conoce los porqués ni los comos. Puede girar cuando no llegas a ver la curva. Nos sorprende, nos derrumba, y nos hace protagonistas de nuestra propia historia.

Y cuándo todo está impecable ella lo desordena de nuevo. Porque eso es la vida, un desastre imperfecto a tiempo completo. Y que sería de nosotros sin sus golpes, sin sus inconclusiones, y sin su desorden.

Todo sería aburrido, monótono y frío, sin todos esos cambios imprevistos y echaría de menos los golpes que pinto de sonrisas.

Por eso, aquel día descubrí lo más importante que podía aprender, la vida no tiene porqué, no tiene respuesta, es solo un sin sentido, que te regala el poder de vivir, experimentar y sentir. Y hay muchas otras preguntas que nos empeñamos en responder, y tampoco nunca tendrán respuesta. Existen y están ahí, pero no tienen una razón concreta. La vida es vivir y dejarse llevar.

No creamos que por saber la respuesta va a tener sentido, lo más probable es que nada cambie.

La vida es luchar y aprender, sonreír, y hacer todo lo posible para que merezca la pena. 

Tú eres el único escritor de tu vida, tú puedes crearla , tú  puedes crearte, porque todos alguna vez fuimos garabatos de nosotros mismos. Solo depende de ti, de tus ganas de sentir y vivir. Que puedes ganar o perder, pero nada te puede impedir intentarlo. Que aunque así lo creas no estás perdido, puedes seguir caminando hacia todo eso que quieres, solo debes saber que tus deseos no son una orden y que tendrás que luchar por ellos. Mi mundo es mi vida, yo puedo cambiar el mundo. La vida es mucho más sencilla, eres tú y puedes vivirla, o seguir queriéndola hacer perfecta.

 - Vida, esa es mi respuesta. -

Silvia Soñadora